Dios me ama y me llama.
Altar y la Cruz de de Notre Dame de Paris,
foto tomada por los bomberos
cuando fue incendiada el 15de abril de 2019.
Era Nochebuena, hace más de 130 años, escuchemos su voz:
"Fui a Notre Dame de Paris para asistir a los oficios de Navidad. Yo
no creía en nada, pero me parecía que en las ceremonias católicas
encontraría inspiración para escribir algo... Los niños del coro
vestidos de blanco estaban cantando lo que después supe era el
Magnificat. Entonces fue cuando se produjo el acontecimiento que ha
dominado toda mi vida. En un instante mi corazón fue tocado y creí. Creí
con tal fuerza de adhesión, con tal agitación de todo mi ser, con una
convicción tan fuerte, con tal certidumbre que no dejaba lugar a ninguna
clase de duda... ¡Dios existe, está ahí! ¡Es alguien, es un ser tan
personal como yo! ¡Me ama! ¡Me llama...! La misma noche de ese memorable
día de Navidad tomé una Biblia y por primera vez escuché el acento de
esa voz tan dulce y a la vez tan inflexible de la Sagrada Escritura que
ya nunca ha dejado de resonar en mi corazón."
No hay comentarios:
Publicar un comentario